Muchos creen que ser un seductor es cuestión de aprender ciertas fórmulas o estrategias, piensan que a las mujeres se les seduce porque hay que decirle las palabras mágicas, cuando en realidad la seducción así se vuelve mucho más compleja.
Todo comienza con el tipo de pensamiento con el que abordas el día a día, el cómo piensas que piensan las mujeres, el intentar percibir la realidad desde un punto de vista común a la sociedad. Todo esto influye para ser un seductor.
Si todo fuera por medio de palabras, entonces, el mejor poeta ganaría siempre la batalla como mejor seductor; pero hoy en día, el mejor poeta cae en la zona de los mejores amigos.
Si quieres saber cómo ser un seductor, primero debes entender la lógica de la seducción, y la lógica es que todo tiene que ser ilógico y más emocional. Menos razonamientos, más descontrol y emoción. La seducción no se entiende, simplemente suceden o deberían suceder las cosas por intuición y dejarse guiar nada más por la emoción sin exagerar al romanticismo frustrado.
Todo comienza por un pensamiento, y éste debe ser el centro de todo lo que se rige en la seducción, la idea aquí es pensar como un seductor, no hablar como un seductor. Hay que interiorizar la mecánica seductiva y conocer la naturaleza de la atracción.
Si te ha gustado esta publicación y no quieres perderte ninguna otra, sígueme a través de Facebook, suscripción por email, Google+,Twitter.